El GUERRERO DE LA LUZ DA LO MEJOR DE SÍ Y ESPERA LO MEJOR DE LOS OTROS,...
La energía de la
Tierra necesita ser renovada.
Las ideas nuevas
necesitan espacio.
El cuerpo y el alma
necesitan nuevos desafíos.
El futuro se
transformó en presente, y todos los sueños —excepto los que contienen
prejuicios —tendrán oportunidad de manifestarse.
Lo que haya sido
importante, permanecerá; lo inútil, desaparecerá. El guerrero, sin embargo, no
está encargado de juzgar los sueños del prójimo y no pierde tiempo criticando
las decisiones ajenas.
Para tener fe en su
propio camino, no necesita probar que el camino del otro está equivocado.
Un guerrero de la
luz estudia con mucho cuidado la posición que pretende conquistar.
Por más difícil que
sea su objetivo, siempre existe una manera de superar los obstáculos. Él
verifica los caminos alternativos, afila su espada, procura llenar su corazón
con la perseverancia necesaria para enfrentarse al desafío.
Pero a medida que
avanza, el guerrero se da cuenta de que existen dificultades con las cuales no
contaba.
Si permanece
esperando el momento ideal, nunca saldrá del lugar; es preciso un poco de locura
para dar el próximo paso.
El guerrero usa un
poco de locura. Porque en la guerra y en el amor, no es posible preverlo todo.
Un guerrero de la
luz conoce sus defectos. Pero conoce también sus cualidades.
Algunos compañeros
se quejan todo el tiempo: "Los demás tienen más oportunidades que
nosotros".
Quizá tengan razón;
pero un guerrero no se deja paralizar por esto, sino que procura valorizar al
máximo sus virtudes.
Sabe que el poder de
la gacela es la habilidad de sus patas. El poder de la gaviota es su puntería
para alcanzar el pez. Aprendió que un tigre no teme a la hiena, porque es
consciente de su fuerza.
Entonces procura
saber con qué puede contar. Y siempre verifica su equipo, compuesto por tres
elementos: fe, esperanza y amor.
Si los tres están
presentes, él no duda en seguir adelante.
El guerrero de la
luz sabe que nadie es tonto, y la vida enseña a todos, aun cuando esto exija
tiempo.
Él da lo mejor de
sí, y espera lo mejor de los otros. Además de eso, procura mostrar a todos los
demás, con generosidad, de cuánto son capaces.
Algunos compañeros
comentan: "Existen personas ingratas".
El guerrero no se
altera por oír esto. Y continúa estimulando a su prójimo, porque es una manera
de estimularse a sí mismo.
Todo guerrero de la
luz ya tuvo alguna vez miedo de entrar en combate.
Todo guerrero de la
luz ya traicionó y mintió en el pasado.
Todo guerrero de la
luz ya recorrió un camino que no le pertenecía.
Todo guerrero de la
luz ya sufrió por cosas sin importancia.
Todo guerrero de la
luz ya creyó que no era un guerrero de la luz.
Todo guerrero de la
luz ya falló en sus obligaciones espirituales.
Todo guerrero de la
luz ya dijo sí cuando quería decir no.
Todo guerrero de la
luz ya hirió a alguien a quien amaba.
Por eso es un
guerrero de la luz; porque pasó por todo eso y no perdió la esperanza de ser
mejor de lo que era.
(Fuente:Manual del Guerrero de la Luz de Paulo Coelho)